Padre pide ayuda a autoridades para encontrar a Martín Margarito. Joven trabajaba en la mina San Cristóbal en Yauli y desapareció sin dejar rastros.
Denuncia. Dolido padre Asunción Margarito Santos quiere hallar a su hijo.
El 27 de marzo de este año, Martín Eugenio Margarito Pino entró en el centro minero San Cristóbal en Yauli y no se le vio más. Su padre, el preocupado Asunción Margarito Santos, lo busca incansablemente sin que alguien –ni los representantes de ese centro minero ni de la Cia. Minera Volcan S.A., propietaria de la primera sepa darle información alguna sobre su paradero. Martín es su único hijo.
La historia de don Asunción es una más en que la informalidad va unida a la fatalidad. El pasado 27 de marzo, Martín (mecánico) entró junto a un maquinista a la mina San Cristóbal, enviado por la empresa L. L. Jiménez a través de la contrata San Pedro. El objetivo: realizar trabajos de maquinaria pesada.
NO TENÍA FOTOCHECK
"El joven no contaba con un fotocheck propio por lo que San Pedro lo hizo ingresar con la identificación de otra persona, porque los trabajos eran urgentes. Es una total informalidad", explica Alexander Condezo Casasola, abogado de don Asunción Margarito. "No solo eso. Don Asunción se entera de la desaparición de su hijo una semana después y no por las empresas sino por otro mecánico". Ante esta alerta, don Asunción decide viajar a Yauli (Junín) a buscar de su hijo.
"Busqué a la administradora Lidia Jiménez, de L. L. Jiménez, y junto a Prudencio Zárate, gerente de San Pedro, le dieron largas al caso. Dijeron que Martín había abandonado su trabajo. Tampoco me dieron el nombre del maquinista que lo acompañó", dice. Por eso pide ayuda a la ministra de Justicia, a la Defensora del Pueblo y a algunos congresistas. No ha perdido la esperanza. Espera respuestas.
LA CLAVE
Sospecha. El abogado explica que la teoría que manejan es que ante la inexperiencia del maquinista se produjo un accidente. "Y no encontraron alternativa más fácil que esconder el cuerpo".
Diario La República Lima 15/11/2008
Denuncia. Dolido padre Asunción Margarito Santos quiere hallar a su hijo.
El 27 de marzo de este año, Martín Eugenio Margarito Pino entró en el centro minero San Cristóbal en Yauli y no se le vio más. Su padre, el preocupado Asunción Margarito Santos, lo busca incansablemente sin que alguien –ni los representantes de ese centro minero ni de la Cia. Minera Volcan S.A., propietaria de la primera sepa darle información alguna sobre su paradero. Martín es su único hijo.
La historia de don Asunción es una más en que la informalidad va unida a la fatalidad. El pasado 27 de marzo, Martín (mecánico) entró junto a un maquinista a la mina San Cristóbal, enviado por la empresa L. L. Jiménez a través de la contrata San Pedro. El objetivo: realizar trabajos de maquinaria pesada.
NO TENÍA FOTOCHECK
"El joven no contaba con un fotocheck propio por lo que San Pedro lo hizo ingresar con la identificación de otra persona, porque los trabajos eran urgentes. Es una total informalidad", explica Alexander Condezo Casasola, abogado de don Asunción Margarito. "No solo eso. Don Asunción se entera de la desaparición de su hijo una semana después y no por las empresas sino por otro mecánico". Ante esta alerta, don Asunción decide viajar a Yauli (Junín) a buscar de su hijo.
"Busqué a la administradora Lidia Jiménez, de L. L. Jiménez, y junto a Prudencio Zárate, gerente de San Pedro, le dieron largas al caso. Dijeron que Martín había abandonado su trabajo. Tampoco me dieron el nombre del maquinista que lo acompañó", dice. Por eso pide ayuda a la ministra de Justicia, a la Defensora del Pueblo y a algunos congresistas. No ha perdido la esperanza. Espera respuestas.
LA CLAVE
Sospecha. El abogado explica que la teoría que manejan es que ante la inexperiencia del maquinista se produjo un accidente. "Y no encontraron alternativa más fácil que esconder el cuerpo".
Diario La República Lima 15/11/2008