Esas son las voces del Perú, las voces de los marchantes en el día final de recorrido, hombres y mujeres que han tenido que llegar hasta la capital en Lima, dejando su casa, su hogar, su familia, su trabajo, para compartir la lucha por un reclamo justo, que nadie debe negar a la humanidad. El derecho al agua y por consiguiente el derecho a la salud, a ser consultados y a decidir por la defensa de la vida antes que sobre cualquier interés económico que dañe a la población.Esta es la gran marcha nacional del agua, un paso que se registrará en la historia de nuestro Perú, y que se seguirá escribiendo hasta que se logre comprender, que no se trata de rechazar toda actividad minera porque sí, sino, se trata de evaluar y decidir por proyectos que verdaderamente sean viables y no perjudiciales, por proyectos con políticas responsables que permitan lograr una convivencia saludable entre minería y agricultura.
* Escuche el informe completo por Juana Edith Martínez.
Coordinadora Nacional de Radio-Lima 10.02.2012