YANACOCHA GENERÓ OTRA CATÁSTROFE ECOLÓGICA
Otra perla más. En la minera Yanacocha se ha generado otro atentado contra el medioambiente. Agua contaminada, producto de los relaves mineros, la cual era transportada por tubos hasta la planta de tratamiento en el sector la Quinua, fue a dar a un canal de regadío.
No se reporto sobre este hecho, la información fue emitida luego de ocho días sucedió el incidente. Ahora, es poco lo que se conoce, pero la magnitud del hecho parece ser la razón por la cual, la empresa minera trató de reportar el suceso cuando “todo ya pasó”.
Diario El Mercurio conversó al respecto con Segundo Sánchez Tello, especialista de la gerencia de Recursos Naturales y Medioambiente (RENAMA) del Gobierno Regional.
¿Cuándo se da a conocer sobre el derrame de las aguas ácidas?
En realidad nos enteramos del caso por información difundida por los medios de prensa. Una comunicación emitida por minera Yanacocha, ocho días después de sucedió el hecho. El derrame de la tubería se registró el 17 de febrero, y se dio a conocer recién el 24.
¿Por qué ocultar el tema?
Tal vez, para tratar de reparar el daño. Se dio a conocer el hecho tal vez por la presión o por enfrentar una difusión mayor, cuando todo ya se tiene bajo control. Tenemos documentos sobre esta información que han sido ingresados al Gobierno Regional el 25 de febrero. Negamos categóricamente que se diga, o se intente hacer creer que conocíamos del hecho con anterioridad.
¿Cuál es el daño que ocasionó ese derrame?
Mucho. Hablamos de agua que llegó al canal Quishuar, hablamos de un canal de más de quince kilómetros de longitud, con las aguas se benefician más de dos mil hectáreas de terreno cultivable. Además del agua que también llega a la planta de tratamiento de Cajamarca.
¿Cómo se dio el hecho?
El agua ácida el producto de los relaves mineros. Las mineras depositan esas tierras ya utilizadas, con productos químicos, cuando llueve se generan lo que llamamos aguas ácidas, las cuales llegan a una poza, conocida como la Chugurana, de ahí, por bombeo en enviada por tubería hasta la planta de tratamiento de La Quinua, y es procesada. En ese trayecto, el tubo colapsó y el agua fue a dar al a la corriente de agua,de ahí a canal Quishuar.
¿Hablamos de cianuro?
Hablamos de agua contaminada, incluso con ácido sulfúrico.
¿Consecuencias en los seres vivos?
Letales. Hablamos de sustancias altamente tóxicas.
¿Siempre se utiliza cal en la planta de tratamiento de SEDACAJ?
La cal es sólo para balancear el pH, no más. Las aguas tratadas nunca tendrán el mismo nivel de calidad que las aguas naturales. Imposible que los tratamientos logren revertir alteraciones en el agua.
¿Se puede determinar cuánta agua contaminó la corriente?
Eso no podemos hacerlo desde Renama, en eso no tenemos competencia. Pero es obligación de otras entidades estatales ver el tema, hablamos de salud, hablamos de la vida de miles de personas, no es un juego.
¿Qué hacer?
Desde Renama se emitirá un pronunciamiento. Sé que las personas afectadas, en la zona del canal también han establecido una movilización contra minera.
Otra perla más. En la minera Yanacocha se ha generado otro atentado contra el medioambiente. Agua contaminada, producto de los relaves mineros, la cual era transportada por tubos hasta la planta de tratamiento en el sector la Quinua, fue a dar a un canal de regadío.
No se reporto sobre este hecho, la información fue emitida luego de ocho días sucedió el incidente. Ahora, es poco lo que se conoce, pero la magnitud del hecho parece ser la razón por la cual, la empresa minera trató de reportar el suceso cuando “todo ya pasó”.
Diario El Mercurio conversó al respecto con Segundo Sánchez Tello, especialista de la gerencia de Recursos Naturales y Medioambiente (RENAMA) del Gobierno Regional.
¿Cuándo se da a conocer sobre el derrame de las aguas ácidas?
En realidad nos enteramos del caso por información difundida por los medios de prensa. Una comunicación emitida por minera Yanacocha, ocho días después de sucedió el hecho. El derrame de la tubería se registró el 17 de febrero, y se dio a conocer recién el 24.
¿Por qué ocultar el tema?
Tal vez, para tratar de reparar el daño. Se dio a conocer el hecho tal vez por la presión o por enfrentar una difusión mayor, cuando todo ya se tiene bajo control. Tenemos documentos sobre esta información que han sido ingresados al Gobierno Regional el 25 de febrero. Negamos categóricamente que se diga, o se intente hacer creer que conocíamos del hecho con anterioridad.
¿Cuál es el daño que ocasionó ese derrame?
Mucho. Hablamos de agua que llegó al canal Quishuar, hablamos de un canal de más de quince kilómetros de longitud, con las aguas se benefician más de dos mil hectáreas de terreno cultivable. Además del agua que también llega a la planta de tratamiento de Cajamarca.
¿Cómo se dio el hecho?
El agua ácida el producto de los relaves mineros. Las mineras depositan esas tierras ya utilizadas, con productos químicos, cuando llueve se generan lo que llamamos aguas ácidas, las cuales llegan a una poza, conocida como la Chugurana, de ahí, por bombeo en enviada por tubería hasta la planta de tratamiento de La Quinua, y es procesada. En ese trayecto, el tubo colapsó y el agua fue a dar al a la corriente de agua,de ahí a canal Quishuar.
¿Hablamos de cianuro?
Hablamos de agua contaminada, incluso con ácido sulfúrico.
¿Consecuencias en los seres vivos?
Letales. Hablamos de sustancias altamente tóxicas.
¿Siempre se utiliza cal en la planta de tratamiento de SEDACAJ?
La cal es sólo para balancear el pH, no más. Las aguas tratadas nunca tendrán el mismo nivel de calidad que las aguas naturales. Imposible que los tratamientos logren revertir alteraciones en el agua.
¿Se puede determinar cuánta agua contaminó la corriente?
Eso no podemos hacerlo desde Renama, en eso no tenemos competencia. Pero es obligación de otras entidades estatales ver el tema, hablamos de salud, hablamos de la vida de miles de personas, no es un juego.
¿Qué hacer?
Desde Renama se emitirá un pronunciamiento. Sé que las personas afectadas, en la zona del canal también han establecido una movilización contra minera.
Diario El Mercurio-Cajamarca 02/03/2011
