¿PLOMO BUENO Y PLOMO MALO?
Los peligros de la contaminación con plomo han alarmado a la población y es un tema ampliamente destacado por los principales medios de comunicación del Perú. Hasta
¿Pero por qué el plomo en juguetes ha desatado un escándalo y no escandaliza, de la misma forma, el plomo que sigue dañando la salud de los niños del Callao, el plomo de la minera Doe Run que ha contaminado a más del 90% de los niños en
¿Por qué el plomo presente, sobre todo, en la gasolina de 84 octanos (prohibida en otros países) no es tan cuestionado por los mismos medios y políticos que ahora han emprendido la campaña contra los juguetes contaminados?
¿Amor a los niños?
¿Temor de que los propios hijos de los voceros de la campaña anti juguetes con plomo puedan ser contaminados? Tal vez, ambas razones podrían considerarse altruistas, nobles y justas. ¿O acaso se trata del lobby de las empresas que fabrican o importan juguetes sin plomo para sacar a las compañías que sí lo hacen?
¿Doble Discurso?
Pero… ¿Por qué usar diferente vara para medir la contaminación con plomo de las industrias del juguete de la contaminación con plomo generada por las empresas mineras y por la industria que lucra con la venta de gasolina plomada?
¿Por qué
¿Segregación, Racismo?
¿El perro del hortelano?
Los voceros del partido de gobierno podrían tener otro excelente ejemplo: ¿Por qué si el Perú no fabrica juguetes, debería impedir que otros lo fabriquen y comercialicen? Por lo demás, razonando perversamente, hasta podrían decir que siendo el Perú país productor de plomo (del que se vende y del que no, pero igual contamina) es hora de dar leyes para promocionar la fabricación de juguetes con plomo en
¡No, qué va, en el país hay transparencia, independencia y libertad de información. En el Perú basta el autocontrol y la autorregulación de las empresas. En el Perú moderno no hay racismo ni segregación… menos aún corrupción de los medios de comunicación!
¿Por Favor, No confundamos las Cosas!
“Por supuesto, hay que ser objetivos y no mezclemos el tierno tema de los niños cuya salud potencialmente peligra por los juguetes contaminados con el tema de los derechos humanos y ambientales de los niños que ya fueron contaminados o están siendo, ahora mismo, contaminados por el plomo en las familias que viven en las proximidades de las explotaciones mineras.”
“Tampoco hagamos caso de los ecologistas que solo buscan desalentar a las empresas mineras y petroleras responsables que se alistan para regalar juguetes a los niños pobres en la próxima navidad: no permitamos que el tema sea politizado y pueda terminar creando una autoridad ambiental autónoma que pudiera ser creíble y para ello estar dotada de mecanismos de anticorrupción.”
Sin duda, estos argumentos o similares serán esgrimidos como respuesta a la discriminación que han establecido muchos medios de comunicación y líderes políticos sobre la existencia del “plomo bueno y el plomo malo”.