11 de septiembre de 2008


JOSÉ DAMMERT BELLIDO FALLECIÓ AYER EN LMA A LOS 91 AÑOS

HASTA PRONTO OBISPO DE PONCHO Y SOMBRERO


Autoridades de Cajamarca izaron la bandera a media asta en señal de duelo por la partida del religioso.

Cajamarca se estremeció al conocer su partida. Inmediatamente la Catedral con repiques de campana convocó a la feligresía que adoró al alemán de poncho y sombrero. José Dammert Bellido, conocido como el "padre de los pobres" por su intensa labor pastoral, a favor de los más necesitados, falleció la madrugada de ayer en lima. El ex obispo de Cajamarca abandonó esta vida a los 91 años. Deja un legado incomparable para su menuda apariencia que supo elevarse por encima de su prematura osteoporosis.

El alcalde Marco La Torre, regidores de la municipalidad provincial y el obispo José Martínez Lázaro, izaron la bandera a media asta y guardaron un minuto de silencio en señal de duelo en la plaza mayor. Otras instituciones públicas como el Gobierno Regional de Cajamarca compartieron la pena de haber perdido a Dammert "He recibido la noticia con mucho dolor al igual que todo el pueblo de Cajamarca que ha quedado consternado con la desaparición de monseñor José Dammert", sostuvo el presidente cajamarquino Jesús Coronel. Mientras que el alcalde Marco La Torre manifestó que la muerte de monseñor Dammert es una gran pérdida para Ca­jamarca, al tiempo de expresar sus condolencias al actual pastor de la Diócesis, José Camelo Martínez Lázaro.

Dammert Bellido nació en Lima en 1917, fue obispo emérito de Ca­jamarca (1962 e 1992), ex presiden­te de la Conferencia Episcopal Pe­ruana (1990-1992) y profesor emérito del departamento académico de derecho de la Pontificia Univer­sidad Católica del Perú (1997).

En 1958 el Papa Pío XII lo nom­bró obispo auxiliar de lima, y en 1962 el Papa Juan XIII dispuso su traslado a Cajamarca, tierra que lo hará descansar en su corazón.

Diario La República 11/09/2008




40 MIL COMUNEROS AMENAZADOS POR LA POLICÍA


Abuso de poder. Los pobladores de la zona El Tingo (provincia Hualgayoc), son hostigados por la propia Policía Nacional del Perú (PNP) para que vendan sus tierras a la empresa minera Coimolache.

Son 40 mil campesinos que sólo tienen como únicas posesiones sus parcelas, unos cuantos animales y su agua. Propiedades que son ambicionadas por la empresa minera para el desarrollo del proyecto Tantahuatay.

“Son los propios policías quienes nos agraden y nos presionan para que vendamos nuestras tierras. A pesar de nuestra oposición a la actividad minera, la empresa insiste en maltratarnos y exigirnos que vendamos nuestras parcelas. Además, ese proyecto planean ejecutarlo en cabecera de cuenca. No sólo dejaríamos de nuestro agro y nuestra ganadería, sino que nos quedaríamos sin agua”, denunció Carlos Chuquilín Chuquilín, dirigente de la comunidad.

“La minera Coimolache nos quiere quitar nuestro terreno a la fuerza, nos quiere votar en complicidad con la PNP y el Ministerio de Energía y Minas (MEM). Por eso hemos acudido a la Defensoría del Pueblo, a los medios de prensa para pedir ayuda para pedir respaldo ante este abuso”, enfatizó el comunero.

Acusó Chuquilín al ingeniero Pablo Menacho, funcionario de MEM, por haber elevado un informe favorable a las pretensiones de empresa minera, señalando que no existía actividad ni agrícola ni ganadera en zona.

“Menacho ha mentido en su informe, toda la zona de cabecera de cuenca la tenemos forestada con pinos, y no permitiremos que malos funcionarios busquen despojarnos de nuestras tierras”, puntualizó el líder.

Diario Panorama Cajamarquino 11/09/2008