17 de marzo de 2008



ADVIERTEN PELIGROSO TRÁFICO ILEGAL DE URANIO EN PERÚ


"El terrorismo nuclear se ha convertido en día una amenaza cada vez más próxima, la percepción sobre el avance de los peligros de la proliferación de armamento nuclear y materiales nucleares a través de los cuales se pueden generar atentados terroristas nos obliga a plantear una profunda revisión de la estrategia respecto de los Estados que puedan facilitar tales materiales", explicó el físico nuclear Rolando Paucar Jáuregui. Según dijo, esta situación se evidenció a raíz de la incursión del Ejército colombiano en territorio ecuatoriano, quedando al descubierto un presunto plan terrorista de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) que incluía la compra de 50 kilos de uranio para la fabricación de bombas sucias.


Informó que en las regiones Piura (Bayovar) y Puno (Carabaya) se extrae uranio. En esta última existen más de nueve empresas mineras formales que realizan trabajos de extracción de forma adecuada. Sin embargo, cada vez son más los mineros informales que ven con simpatía el explorar y extraer uranio, almacenándolo en sus casas sin prever el daño que este mineral puede causarles.


En Puno, el uranio se encuentran en la superficie, convirtiéndose en un riesgo para la vida de los mineros y sus familias.

"Ellos se ponen en riesgo, con riesgo de contaminar también el medio ambiente", dijo.

"En el Perú en el caso específico del uranio tenemos el problema de la minería informal que durante mucho tiempo ha venido traficando con uranio de manera irresponsable, por eso no sería extraño descubrir que uranio peruano pueda caer en manos de grupos terroristas", denunció.


RECOMIENDAN A CONGRESO LEGISLAR SOBRE MANIPULACIÓN DE URANIO


Por ese motivo consideró imperativo que los proyectos de ley sobre minerales de uranio, pendientes en el Congreso, sean debatidos cuanto antes de tal manera que aseguremos una mejor regulación de esta actividad, teniendo como objetivo principal el claro respeto a la normatividad vigente en temas de medio ambiente, seguridad ciudadana, seguridad estratégica y promoción de la inversión.


El también presidente del Instituto de Investigación para la Energía y el Desarrollo (IEDES), afirmó que hasta el momento el objetivo de las organizaciones internacionales en el tema nuclear se basa en establecer un circuito seguro para el transporte de los materiales radiactivos de forma que no quede duda alguna del destino de los mismos.

Sin embargo –manifestó- la preocupación principal no debe ser el transporte, sino vigilar que en las idas y venidas del uranio u otro material radiactivo entre países distintos y dentro de cada país no se extravíe ningún compuesto, expertos dentro del ambiente nuclear reconocen que esta vigilancia es aún distante y poco efectiva.


Informó que este es la caso del Perú pues a la fecha cuenta en su haber con situaciones que han comprometido la seguridad nacional debido a la pérdida de fuentes radiactivas, como lo sucedido hace algunos años.


El físico nuclear recordó que se pudo comprobar la existencia de fuentes radiactivas extraviadas no registradas, las cuales habrían ingresado por la frontera, tal como lo haría cualquier artículo de contrabando. En este caso las fuentes radiactivas nunca fueron encontradas. Otro incidente se presentó cuando quedó al descubierto por medios de comunicación de Venezuela de un envío irregular de una fuente de cobalto-60 del puerto del Callao al puerto Cabello de ese país.


Indicó que el Instituto peruano de Energía Nuclear es el ente encargado de realizar el control de la exploración, extracción y utilización del uranio, por lo que el Instituto de Investigación para la Energía y el Desarrollo (IEDES) presentó diversas propuestas al Congreso de la República con la finalidad de que estas operaciones se realicen de la mejor forma y guardando las debidas normas de seguridad.

"Sale e ingresa material radioactivo del Perú sin ningún tipo de control", advirtió.


¿Qué es una bomba sucia?

Paucar Jáuregui indicó que una bomba sucia es un dispositivo diseñado para dispensar material radiactivo en el medio ambiente, capaz de causar muerte e inutilizar un área.

No es un arma nuclear pese a esparcir uranio, plutonio u otro material radiactivo.

El efecto de la onda expansiva se debe sólo al explosivo convencional, no producto de fisión nuclear, como sucedería en una bomba atómica. Aunque en todos los casos se necesita planificación, conocimientos específicos en el tema y montos de dinero considerables, su fabricación es posible pues no existen obstáculos insuperables que impidan que terroristas las construyan.

"Es una bomba convencional a la que se le ha colocado alrededor material radioactivo como plutonio, uranio, cesio o cobalto. Al explosionar, además de los efectos de una bomba normal, emitirá radiación que puede causar la muerte de personas", precisó.

RPP 12/03/2008