Por Raquel Neyra
Una de las estrategias de las fuerzas armadas es
la guerra del desgaste. Actualmente, este es el método utilizado por
Yanacocha y el actual gobierno contra los opositores al proyecto minero
Conga.
Se difunden rumores en la población que la PIC cometería atentados
durante las fiestas y simpatizantes se acercan a advertir a los
dirigentes de que tengan muchísimo cuidado, que sicarios de a cien soles
estarían en la ciudad dispuestos a dispararles. Al salir de casa
debemos asegurarnos de que estan bien cerradas ya que detrás de un
supuesto «robo» podría esconderse un allanamiento de domicilio, cosa muy
fácil de hacer durante las fiestas.
Celendín , una de las trece provincias de Cajamarca, al norte del Perú |
El clima de inseguridad alcanza su máximo, se instala poco a poco un
clima de terror que obliga a los activistas a vivir a cien por hora
temiendo de cada sombra. Además, los guardianes de las lagunas siguen
siendo amedrentados por disparos al aire nocturnos tirados por no se
sabe quién.
Pero como la resistencia pacífica sigue firme y comprometida y va
ganando adeptos dentro de la población, dentro y fuera del país – el
pronunciamiento de la Plataforma Institucional Celendina (PIC) ha dado
la vuelta al mundo y recibimos apoyo y pedido de entrevistas de fuera
del país -, las campañas de difamación son cada vez más fuertes y
frecuentes, no solamente se rebusca en la vida privada de los dirigentes
y se los embarra inventando financiamientos oscuros de oenegés aún más
oscuras y de todas maneras extranjeras, acusándolos de viajes y de
propiedad de bienes inexistentes; estas campañas se difunden ya sin
ninguna verguenza en las radios, periódicos chatarra y pasquines.
El rumor se instala y es difícil contradecirle, obligando a los
activistas a salir a las calles a desmentir boca a boca todos los falsos
rumores. En youtube, twitter y facebook aparecen trolls y falsas
amantes dedicados a embarrar la imagen de los dirigentes y activistas.
Muchas veces el daño ya está hecho y es difícil convencer de la
inocencia de aquéllos.
La mina busca cansar a los dirigentes, las finanzas se debilitan, hay
que ingeniárselas para sacar dinero para seguir luchando, para
alimentar a los guardianes, para viajar a las diferentes fiscalías en
donde son denunciados.
Así van las cosas, pero todos reafirmaron su deseo de lucha y quedarse firmes en la lucha.
¡Conga… no va!
¡Chadin 2 tampoco!
¡Chadin 2 tampoco!
http://servindi.org 31.07.13