El ministro de Energía y Minas indicó la actividad
minera en el país ayudará a afrontar la crisis y que nuestro país cuenta
con las condiciones necesarias para que los inversionistas apuesten por
nuestra minería.
El Perú cuenta con las condiciones necesarias para seguir atrayendo
las inversiones, al margen de la coyuntura internacional, pues es una de
las economías más sólidas del mundo y mantiene sus niveles de
competitividad, manifestó el ministro de Energía y Minas, Jorge Merino.
Considerando que la coyuntura internacional no es la más óptima, ¿cuáles son las perspectivas para el sector minero?
Las perspectivas en torno a la producción de cobre son muy buenas
para el Perú. En principio, hay grandes proyectos que están en ejecución
y lo importante es que ya no dependen del precio internacional del
cobre, pues cuentan con el financiamiento necesario para su desarrollo.
Y es que en el Perú contamos con las condiciones necesarias para que
los inversionistas apuesten por nuestra minería. Los niveles de
producción que registramos en varios minerales nos permiten afrontar la
crisis en buena posición, lo que definitivamente despierta el interés de
los inversionistas.
Tenemos, por ejemplo, la ampliación de Cerro Verde, Las Bambas,
Toromocho, Constanza, y otros proyectos de menor envergadura que también
suman al desarrollo. El efecto volumen nos ayuda a compensar de alguna
forma la reducción del precio del cobre.
Ahora, en lo que debemos seguir trabajando es en las mesas de
desarrollo como las de Corani (Puno) y Cañaris (Lambayeque) y, esperamos
que también en Conga (Cajamarca), a fin de seguir incentivando mayores
inversiones y las exploraciones que tanto necesitamos.
Precisamente, la Cámara de Comercio y Producción de Cajamarca
expresó su preocupación por la situación de esta región, ¿qué se piensa
hacer?
Cajamarca, con los ingentes recursos que tiene, ha retrocedido como
región un 20% en la lucha contra la pobreza comparado con otras
regiones. Esto se debe a una política aplicada no para su desarrollo,
sino para el beneficio personal de algunos dirigentes.
Por eso, el gobierno nacional, las autoridades locales y las rondas
campesinas que quieran participar, debemos enfocarnos en el desarrollo
de la energía, el agua y la construcción de carreteras. Queremos
trabajar por Cajamarca, pues tiene todo el derecho de crecer.
¿Cómo va la lucha contra la minería ilegal?
Hemos tenido una reunión con el alto comisionado que ha nombrado la
Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), cuya secretaría técnica es
una dirección instalada en el ministerio de Energía y Minas para actuar
de manera multisectorial y así combatir esta lacra.
Hemos visto, por ejemplo, que en Madre de Dios, más de 4,000 barriles
diarios de combustibles, procedentes de Mollendo e Ilo, se han
transportado a esta zona para la minería ilegal.
Realizaremos todos nuestros esfuerzos para controlar el comercio de
estos insumos, no solamente por el tema de combustibles, sino que
también controlaremos la comercialización y uso de otros insumos
químicos que se utilizan para este propósito. Seremos muy drásticos con
este tema. Aplicaremos la ley en todos sus aspectos. No podemos permitir
que esta actividad perjudique nuestra economía y, principalmente,
nuestro medio ambiente.
En el sector eléctrico, ¿cuáles son los principales indicadores de desarrollo?
El crecimiento del país requiere que haya una garantía de la oferta
energética. Todos sabemos que nuestro país continúa siendo atractivo en
el aspecto minero porque tiene una energía competitiva y confiable, más
barata que la de otros países.
En ese sentido, trabajamos para que la matriz energética tenga las
reservas suficientes en un mínimo de 30%. Por ello, lanzaremos una
reserva de 1,000 megavatios como parte del nódulo energético del sur y
encargaremos a Proinversión la venta de 1,100 megavatios para generación
hidráulica; así como de 220 megavatios para generación RED y un paquete
de líneas de transmisión. Pronto haremos anuncios importantes para
propiciar la promoción de más centrales hidroeléctricas en el país de
tal forma que podamos desarrollar el gran potencial que tenemos, el cual
puede llegar a los 70,000 megavatios.
Asimismo, recientemente nos reunimos con el gobierno de Ecuador para
la conexión de 500 kilovatios entre ese país y el nuestro, lo que nos
permitirá una conexión sincronizada de ida y vuelta, con grandes
beneficios para ambos.
¿Cuáles son las perspectivas en este campo?
El próximo año entrarán 1,400 megavatios nuevos al sistema. Hace seis
meses realizamos el mantenimiento de la central hidroeléctrica de El
Mantaro, de tal forma que salieron a servicio más de 1,000 megavatios,
sin problema alguno en el sistema; además, entraron en funcionamiento
otras centrales pequeñas y estamos trabajando coordinadamente con el
Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional
(COES). El nódulo energético del sur es sumamente importante para
nosotros. Hemos otorgado una nueva línea de 500 kilovatios de El Mantaro
hasta Montalvo (adjudicada a la Empresa de Interconexión Eléctrica
-ISA-, por US$ 278.4 millones), lo que le dará más confiabilidad al
sistema. Queremos un sistema planificado de tal forma que mantengamos
por muchos años nuestra gran fortaleza que es la competitividad
energética.
Más gas
El Gobierno otorgó la buena pro a Graña y Montero Petrolera
para abastecer de gas natural a 10 ciudades alto andinas, ¿qué significa
esto para el país?
Este es un hecho muy importante porque marca el comienzo en la
realización de un viejo anhelo de dotar a la zona alto andina de gas
natural. Con este proceso, se confirma la intención del Gobierno de
lograr que todo el país se beneficie con este recurso.
¿Cuáles serán los beneficios directos iniciales?
En un inicio esperamos que alrededor de 6,000 vehículos se conviertan
al uso de GNV. También, los pequeños negocios podrán utilizar el gas
natural, pero lo más importante es que este hidrocarburo será utilizado
para calefacción en los tambos, escuelas y hospitales, especialmente en
las épocas de mucho frío. Este proceso es una reivindicación para los
peruanos que habita en esas zonas.
Considerando que el Estado está abocado a la masificación de gas natural, ¿cuáles son los avances al respecto?
Vamos por buen camino. A la fecha hay 132 mil conexiones
domiciliarias entre Lima e Ica, lo que significa que aproximadamente 600
mil personas se benefician con este recurso. Asimismo, en distritos
como Lurín, Cercado de Lima y San Juan de Miraflores hay familias que ya
pagan entre 8 y 12 nuevos soles por el uso del gas.
Pero también estamos trabajando con los gobiernos regionales de las
zonas alto andinas para el tendido de redes. En un inicio llegaremos con
el gas virtual y luego iniciaremos las conexiones por tuberías. Además,
el 25 de este mes se dará la buena pro para el transporte del gas
licuado desde Melchorita a todas las ciudades de la costa, incluyendo
Cerro de Pasco.
Dentro de este proceso de masificación está el Fondo de Inclusión Social Energético (FISE), ¿qué resultados pueden mostrarse?
Es un programa exitoso. Funciona en todo el país. Ya se han entregado
533 mil vales, lo que implica que más de dos millones de peruanos
pobres se benefician con el FISE.
Además, el programa va de la mano con Cocinas Perú, el cual otorga
cocinas a personas cuyo consumo de electricidad es inferior a los 30
kilovatios por hora al mes; pero también va dirigido a quienes no tienen
luz y han sido empadronados, de tal manera que llegamos a todo el país.
A ello se suma también el concurso para la instalación de 500 mil
paneles solares en las zonas más alejadas del país. Así, esperamos
llegar al 97% de la electrificación rural en 2016.
Diario El Clarín 23.07.13