13 de abril de 2014

Venta de Las Bambas: El deal más grande de la historia del Perú

El monto que pagó el consorcio liderado por MMG, filial de China Minmetals, sólo se compara con la suma de todas las fusiones y adquisiciones del 2013. Es el proyecto más importante del país.

Trabajos de exploración en la mina Las Bambas Foto:Glencore Xstrata


Tras varias demoras, finalmente se concretó la venta del proyecto cuprífero Las Bambas, ubicado en Apurímac. Tal como se esperaba, el consorcio de empresas chinas encabezado por MMG, filial de la estatal China Minmetals, es su nuevo dueño. Otras empresas también compitieron por la compra –entre ellas las mineras chinas Jiangxi Copper y Chinalco–, pero finalmente abandonaron el proceso.

Un hito financiero…

La transacción por Las Bambas es, de lejos, el deal más importante de la historia del país. Los US$5,850 millones de la compra se acercan al monto total de todas las fusiones y adquisiciones realizadas en el Perú en el 2013 (US$6,767 millones aproximadamente, sin considerar los montos de transacciones mantenidos en reserva) (SE 1403).
La adquisición más importante del año pasado fue la venta de Petrobras de sus activos en el Perú a la empresa estatal china PetroChina. El monto de la operación, US$2,600 millones, es menos de la mitad del monto acordado por Las Bambas.
Otros deals de peso del 2013 fueron la adquisición de la pesquera Copeinca por China Fishery Group (CFG) por US$779 millones, la venta de AFP Horizonte a Profuturo AFP de Scotiabank y a AFP Integra de Sura en partes iguales por US$544 millones (SE 1325), y la venta de Nextel del Perú a Entel Chile por US$400 millones (SE 1366, 1352). Las diferencias son evidentes.
Sin embargo, la venta de Las Bambas fue un deal forzado: el Ministerio de Comercio de China exigió a Glencore desprenderse de un activo importante para aprobar su fusión con Xstrata, hasta entonces uno de las mineras de cobre más importantes del mundo.

 …y también minero

Además de la trascendencia financiera, Las Bambas es actualmente el proyecto minero más importante del país, con una inversión requerida de US$5,900 millones, según la estimación de Glencore Xstrata. “No ha habido una inversión minera tan grande como Las Bambas”, asegura Marita Chappuis, consultora en temas mineros y blogger de SEMANAeconómica. La construcción del proyecto se inició en el 2012 y, para fines del 2013, demandaba 16,500 trabajadores.
En comparación, el proyecto Toromocho de Chinalco requerirá de US$4,800 millones; el proyecto Conga de Yanacocha, de un monto similar; y la ampliación de Cerro Verde, de Southern Perú, de US$4,600 millones. Junto con los proyectos Toromocho, Cerro Verde y Constancia, Las Bambas llevará a que el Perú duplique su producción de cobre.
El proyecto también ayudará a impulsar proyectos mineros en los alrededores. “Las Bambas está ubicada en un distrito minero muy prometedor, que llega hasta Yauri en Cusco, donde está la mina Antapaccay y la futura mina Coroccohuayco, ambas de Glencore Xstrata”, explica Chappuis. Antapaccay, prolongación del proyecto Tintaya, inició su fase de producción en octubre del 2012. Produce aproximadamente 160,000 toneladas de concentrado de cobre. Coroccohuayco comenzaría a producir en el 2018 (100,000 toneladas aproximadamente).
“Sería interesante que se construya una fundición de cobre en esta zona, por la cantidad de yacimientos con contenidos interesantes de este metal”, agrega Chappuis. Otras empresas también tienen proyectos cupríferos en la zona, como Los Chancas (de Southern Perú) y Haquira (de First Quantum).
Según Glencore Xstrata, la fase de producción comenzaría durante el segundo semestre del 2015, con un estimado de 400,000 toneladas de cobre por año durante los primeros cinco años. La producción se reduciría luego a 300,000 toneladas anuales. La vida útil de la mina supera los 20 años.
El proyecto ya tiene el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) aprobado, por lo que tiene luz verde del gobierno para continuar. Actualmente, el proyecto tiene un avance de 60% a 70%. A setiembre del 2013, requería de 16,500 trabajadores.
Se construirán tres minas a tajo abierto y Glencore Xstrata habrá invertido cerca de US$3,500 millones para cuando se concrete la venta. Eso dejaría un saldo de US$2,400 millones que el consorcio liderado por MMG, de China Minmetals, tendrá que asumir. Sólo este saldo representa más del doble de la inversión requerida para el proyecto Tía María, de Southern Perú.
Las condiciones sociales del proyecto son positivas. El gobierno ha actuado de manera preventiva en la zona, al instalar la Mesa de Desarrollo de Cotabambas (zona del proyecto), con el objetivo de generar una percepción positiva hacia la minería.
En esta mesa, que culminó en diciembre, el gobierno acordó realizar proyectos de electrificación, carreteras, saneamiento, salud y educación por S/.288 millones. Actualmente existe un conflicto social de baja intensidad, según la Defensoría del Pueblo, pero el diálogo se mantiene y no hay indicios de un conflicto intenso.
Glencore Xstrata ha construido un nuevo centro poblado, Nueva Fuerabamba, adonde se han reubicado más de 450 familias de la zona.

Los riesgos

Hay dos riesgos sobre el proyecto. En primer lugar, los nuevos dueños chinos podrían realizar una revisión de la factibilidad del proyecto, lo cual podría retrasar aún más el inicio de operaciones. Inicialmente se esperaba para inicios del 2015, pero fue retrasado para la segunda mitad del año.
SEMANAeconómica se entrevistó en exclusiva sobre este tema con Marcelo Bastos, director general de Operaciones de MMG, y le consultó sobre una posible revisión al proyecto actual. “En líneas generales, queremos continuar con los planes de Glencore Xstrata”, agregó Bastos. “Las Bambas es un proyecto en construcción. No hay mucho que cambiar de lo que Glencore Xstrata ya hizo. La intención es hacer lo necesario para terminar el acuerdo e iniciar la producción cuanto antes”.
Aún así, MMG realizará una revisión de los planes del proyecto durante los próximos tres meses junto con los directivos de Glencore Xstrata, dijo Bastos a SE. A fines del próximo trimestre, la empresa anunciará si modifica o no el calendario del proyecto.
Un segundo riesgo es la presencia de mineros informales, quienes han invadido una parte del terreno de la concesión de Las Bambas, según José Luis López, coordinador del Grupo de Diálogo Minería y Desarrollo Sostenible. Si bien esta área no formará parte de las operaciones iniciales, sí representa un riesgo para el desarrollo futuro del proyecto.