“Exigimos se de cumplimiento a la sentencia. Si no es así vamos a recurrir a las instancias nacionales y supranacionales como el Tribunal Internacional de La Haya y al Tribunal Latinoamericano del Agua en defensa del agua que por derecho nos corresponde” afirmaron representantes de la provincia cusqueña de Espinar.
Tanto Eloy Chancarayauri, alcalde Espinar como William Inca, presidente del Comité de Defensa de los Recursos Hídricos y Medio Ambiente de Espinar, se pronunciaron en una conferencia de prensa realizada el 6 de octubre en los ambientes de la asociación CooperAcción.
Los voceros de Espinar exigen se cumpla la sentencia judicial de diciembre de 2008 que dispone se realice un estudio de impacto ambiental y un estudio de balance hídrico, así como que el Estado se abstenga de firmar la contrata con las empresas ganadoras de la buena pro.
Advierten, que de no llegar a ningún acuerdo con el Gobierno en la mesa de diálogo a realizarse el 11 de octubre, es muy probable que la población retome la huelga general indefinida.
Consideraron inapropiadas las declaraciones de Javier Villa Stein, presidente del Poder Judicial, que pese a no referirse directamente al proyecto Majes Sigüas II, el pasado 25 de septiembre lamentó que grandes proyectos de inversión se paralicen por un juez que solo se basó en un expediente.
Los representantes de Espinar presentaron esta semana un memorial al presidente del Congreso de la República, César Zumaeta, donde solicitan se dé trámite a una denuncia que presentaron contra Villa Stein ante la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA).
En el documento sostienen que el máximo representante del sector Jjusticia trasgredió el artículo 99 al brindar declaraciones de carácter juridiccional, violando así la independencia de los jueces en el caso de la licitación y contrato Majes Sigüas II.
El Proyecto Majes Siguas II
El Proyecto Especial Majes Sigüas fue creado por decreto Ley Nº 18970 en el año 1971 durante el gobierno militar del general Juan Velasco Alvarado.
El proyecto hidráulico consiste en abastecer y regular las aguas a través de un trasvase por medio de túneles y canales de los ríos Apurímac y Colca hacia la Pampa de Majes y Siguas, en la region Arequipa.
El objetivo es obtener agua para la agricultura irrigando hasta 60 mil hectáreas de tierras nuevas en dichas pampas, generar energía eléctrica y otros usos urbanos, industriales y agroindustriales del agua para así permitir el desarrollo regional.
El enfoque que plantea el gobierno es que se consuma poca agua por hectárea porque de esa manera se apunta hacia los cultivos de exportación y se optimiza una infraestructura hidráulica.
El diseño del Proyecto Majes Siguas II está conformado por obras de regulación, aducción, derivación y distribución que se desarrollan en dos etapas.
La primera etapa está concluida con la construcción de la represa Condoroma, Bocatomas de Tuti y Pitay, Aducción Colca-Siguas, derivación Siguas hacia Pampa de Majes y la red de distribución e infraestructura de riego.
La segunda etapa consta de la construcción de la presa de Angostura, la Derivación Angostura-Colca, Siguas hacia Pampas de Siguas, la red de distribución e infraestructura. Además, de las centrales hidroeléctricas de Lluta y Llucta.
El Conflicto en Espinar
Los pobladores de la provincia de Espinar en Cusco son quienes se oponen a la realización de la segunda etapa del proyecto porque según su alcalde, Eloy Chancarayauri, no se está respetando su derecho fundamental de acceso al agua.
El rechazo nace a raíz de que Espinar se quedaría desabastecido de agua por la construcción de la hidroeléctrica Angostura, la cual se alimentará del río Apurímac, y que se prevé irrigará 46 mil hectáreas en la región vecina de Arequipa.
Chancarayauri explica que el río Apurímac es el único medio por el cual los 78 mil habitantes de Espinar pueden consumir agua debido a que los otros dos ríos: el Salado y el Ccañipía, se encuentran contaminados por la minería.
“Solo contamos con dos horas de agua durante todo el día”, señala el burgomaestre y añade que ese no es el único problema.
“El Proyecto de Irrigación del Cañón del Apurímac, que ya está avanzado, se vendría abajo junto a otros cinco pequeños proyectos que su municipio junto con el gobierno regional vienen desarrollando”, señala el alcalde.
Por su parte, William Inca, presidente del Comité de Defensa de los Recursos Hídricos y Medio Ambiente de Espinar, señala que 50 mil habitantes que se dedican al sector agropecuario se verían afectados por la falta del preciado recurso hídrico.
Mientras, los pobladores de la región Arequipa insisten en que la construcción de la presa de Angostura debe seguir adelante, convencidos del impulso que dará a su región.
En noviembre de 2009 el presidente regional de Arequipa, Juan Guillén Benavides, junto a diversas organizaciones sociales, conformaron el Comité Ciudadano de Arequipa para la Defensa y Ejecución del Proyecto Hidroenergético Majes Siguas II.
De otro lado, en el Cusco -a mediados de diciembre del año pasado- se conformó el Frente Cívico Social en Defensa de Recursos Hídricos de la Cuenca Alta del Río Apurímac.
Iniciado el 2010 la situación se volvió tensa con protestas y cierre de carreteras, al punto que el 17 de septiembre último el violento enfrentamiento entre pobladores de Espinar con 500 policías dejó dos muertos, uno de ellos solo de 15 años, y más de veinte heridos.
Los pobladores de Espinar protestó porque pese a existir una sentencia judicial, de diciembre del 2008, que paraliza el proyecto Majes Sigüas II hasta que se realice el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y el Estudio de Balance Hídrico, el gobierno entregó la buena pro el 13 de septiembre, dos días antes de la fecha señalada.
Limitaciones del proyecto
La organización no gubernamental CooperAccion también tiene la posición que estos estudios deben realizarse porque “el proyecto carece de una visión de cuenca”.
El analista José de Echave indica que “es urgente que se instale el Consejo de Cuenca del río Apurímac, parte alta y baja del río Apurímac. Este Consejo debería tener como primera tarea una evaluación externa del proyecto, tal como se señala en la Ley de Recursos Hídricos (Ley Nº 29338), y en su Reglamento (D.S. Nº 001-2010-AG)”.
La grave situación de Espinar se advirtió con tiempo al Ejecutivo, señala el alcalde Chancarayauri, pero el “gobierno no quiso escuchar nuestras demandas”, indica.
Después de dar muestra una vez de la incapacidad del Estado de viabilizar el conflicto, recién el 24 de septiembre la Presidencia del Consejo de Ministros decidio constituir una Comisión de Alto Nivel.
La comisión es presidida por Jorge Villasante, ministro de la Producción y tiene el rol de analizar las demandas de la población de la provincia de Espinar.
Mientras, el día 6 de octubre se llevó a cabo la reunión de la cuarta mesa técnica en el Cusco, entre técnicos de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y representantes de la población de Espinar.
Actualmente, se tiene previsto concretizar la mesa de diálogo este lunes 11 de octubre.
Servindi-Lima 08/10/2010
Tanto Eloy Chancarayauri, alcalde Espinar como William Inca, presidente del Comité de Defensa de los Recursos Hídricos y Medio Ambiente de Espinar, se pronunciaron en una conferencia de prensa realizada el 6 de octubre en los ambientes de la asociación CooperAcción.
Los voceros de Espinar exigen se cumpla la sentencia judicial de diciembre de 2008 que dispone se realice un estudio de impacto ambiental y un estudio de balance hídrico, así como que el Estado se abstenga de firmar la contrata con las empresas ganadoras de la buena pro.
Advierten, que de no llegar a ningún acuerdo con el Gobierno en la mesa de diálogo a realizarse el 11 de octubre, es muy probable que la población retome la huelga general indefinida.
Consideraron inapropiadas las declaraciones de Javier Villa Stein, presidente del Poder Judicial, que pese a no referirse directamente al proyecto Majes Sigüas II, el pasado 25 de septiembre lamentó que grandes proyectos de inversión se paralicen por un juez que solo se basó en un expediente.
Los representantes de Espinar presentaron esta semana un memorial al presidente del Congreso de la República, César Zumaeta, donde solicitan se dé trámite a una denuncia que presentaron contra Villa Stein ante la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA).
En el documento sostienen que el máximo representante del sector Jjusticia trasgredió el artículo 99 al brindar declaraciones de carácter juridiccional, violando así la independencia de los jueces en el caso de la licitación y contrato Majes Sigüas II.
El Proyecto Majes Siguas II
El Proyecto Especial Majes Sigüas fue creado por decreto Ley Nº 18970 en el año 1971 durante el gobierno militar del general Juan Velasco Alvarado.
El proyecto hidráulico consiste en abastecer y regular las aguas a través de un trasvase por medio de túneles y canales de los ríos Apurímac y Colca hacia la Pampa de Majes y Siguas, en la region Arequipa.
El objetivo es obtener agua para la agricultura irrigando hasta 60 mil hectáreas de tierras nuevas en dichas pampas, generar energía eléctrica y otros usos urbanos, industriales y agroindustriales del agua para así permitir el desarrollo regional.
El enfoque que plantea el gobierno es que se consuma poca agua por hectárea porque de esa manera se apunta hacia los cultivos de exportación y se optimiza una infraestructura hidráulica.
El diseño del Proyecto Majes Siguas II está conformado por obras de regulación, aducción, derivación y distribución que se desarrollan en dos etapas.
La primera etapa está concluida con la construcción de la represa Condoroma, Bocatomas de Tuti y Pitay, Aducción Colca-Siguas, derivación Siguas hacia Pampa de Majes y la red de distribución e infraestructura de riego.
La segunda etapa consta de la construcción de la presa de Angostura, la Derivación Angostura-Colca, Siguas hacia Pampas de Siguas, la red de distribución e infraestructura. Además, de las centrales hidroeléctricas de Lluta y Llucta.
El Conflicto en Espinar
Los pobladores de la provincia de Espinar en Cusco son quienes se oponen a la realización de la segunda etapa del proyecto porque según su alcalde, Eloy Chancarayauri, no se está respetando su derecho fundamental de acceso al agua.
El rechazo nace a raíz de que Espinar se quedaría desabastecido de agua por la construcción de la hidroeléctrica Angostura, la cual se alimentará del río Apurímac, y que se prevé irrigará 46 mil hectáreas en la región vecina de Arequipa.
Chancarayauri explica que el río Apurímac es el único medio por el cual los 78 mil habitantes de Espinar pueden consumir agua debido a que los otros dos ríos: el Salado y el Ccañipía, se encuentran contaminados por la minería.
“Solo contamos con dos horas de agua durante todo el día”, señala el burgomaestre y añade que ese no es el único problema.
“El Proyecto de Irrigación del Cañón del Apurímac, que ya está avanzado, se vendría abajo junto a otros cinco pequeños proyectos que su municipio junto con el gobierno regional vienen desarrollando”, señala el alcalde.
Por su parte, William Inca, presidente del Comité de Defensa de los Recursos Hídricos y Medio Ambiente de Espinar, señala que 50 mil habitantes que se dedican al sector agropecuario se verían afectados por la falta del preciado recurso hídrico.
Mientras, los pobladores de la región Arequipa insisten en que la construcción de la presa de Angostura debe seguir adelante, convencidos del impulso que dará a su región.
En noviembre de 2009 el presidente regional de Arequipa, Juan Guillén Benavides, junto a diversas organizaciones sociales, conformaron el Comité Ciudadano de Arequipa para la Defensa y Ejecución del Proyecto Hidroenergético Majes Siguas II.
De otro lado, en el Cusco -a mediados de diciembre del año pasado- se conformó el Frente Cívico Social en Defensa de Recursos Hídricos de la Cuenca Alta del Río Apurímac.
Iniciado el 2010 la situación se volvió tensa con protestas y cierre de carreteras, al punto que el 17 de septiembre último el violento enfrentamiento entre pobladores de Espinar con 500 policías dejó dos muertos, uno de ellos solo de 15 años, y más de veinte heridos.
Los pobladores de Espinar protestó porque pese a existir una sentencia judicial, de diciembre del 2008, que paraliza el proyecto Majes Sigüas II hasta que se realice el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y el Estudio de Balance Hídrico, el gobierno entregó la buena pro el 13 de septiembre, dos días antes de la fecha señalada.
Limitaciones del proyecto
La organización no gubernamental CooperAccion también tiene la posición que estos estudios deben realizarse porque “el proyecto carece de una visión de cuenca”.
El analista José de Echave indica que “es urgente que se instale el Consejo de Cuenca del río Apurímac, parte alta y baja del río Apurímac. Este Consejo debería tener como primera tarea una evaluación externa del proyecto, tal como se señala en la Ley de Recursos Hídricos (Ley Nº 29338), y en su Reglamento (D.S. Nº 001-2010-AG)”.
La grave situación de Espinar se advirtió con tiempo al Ejecutivo, señala el alcalde Chancarayauri, pero el “gobierno no quiso escuchar nuestras demandas”, indica.
Después de dar muestra una vez de la incapacidad del Estado de viabilizar el conflicto, recién el 24 de septiembre la Presidencia del Consejo de Ministros decidio constituir una Comisión de Alto Nivel.
La comisión es presidida por Jorge Villasante, ministro de la Producción y tiene el rol de analizar las demandas de la población de la provincia de Espinar.
Mientras, el día 6 de octubre se llevó a cabo la reunión de la cuarta mesa técnica en el Cusco, entre técnicos de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y representantes de la población de Espinar.
Actualmente, se tiene previsto concretizar la mesa de diálogo este lunes 11 de octubre.
Servindi-Lima 08/10/2010