26 de octubre de 2010

Fueron devoradas por una grieta que se abrió a sus pies en el nevado Perpetuo, en las faldas del cerro Proyecto Cóndor, en San Antonio de Putina, Puno.
TRES MUJERES MINERAS MUEREN SEPULTADAS


Tres mujeres perdieron la vida mientras recogían material minero, literalmente fueron devoradas por la tierra, cuando una grieta se abrió a sus pies, en el glaciar nevado Perpetuo, zona de Santa María, en las faldas del cerro Proyecto Cóndor (centro minero Lunar de Oro) en la provincia San Antonio de Putina, en la región Puno. La zona de peligro fue declarada de inminente deslizamiento de rocas, por lo que se notificó a los contratistas mineros y otras personas, para retirarse del lugar.

Ocurrió al promediar las 8:15 horas del domingo, cuando varias mujeres realizaban su labor diaria de rebuscar mineral aurífero, cuando fueron sorprendidas por una inusual abertura del glaciar, siendo sepultadas instantáneamente por desmonte de mina, las tres féminas desaparecieron en el acto.

Entre lágrimas una mujer narró que “sólo por necesidad de llevar un pan a casa, como todos los días, entre varias mujeres realizábamos el trabajo de “pallaqueo” (rebusque de mineral), de un momento a otro se abrió el suelo devorando inmediatamente a mi madre y otras dos mujeres. Mis compañeras y yo no pudimos hacer nada para salvarles la vida, sólo pedimos auxilio, yo me salvé milagrosamente”, asustada manifestó la mujer.

Las mujeres devoradas por la tierra responden al nombre de Agripina Arizaca Canahuire (55), Azángaro; Sonia Mamani Condori (38), Huatasani - Huancané y Natalia Araujo Bellido (42), Patambuco -Sandia. Autoridades y funcionarios de la Corporación Minera Ananea S.A. realizan coordinaciones para iniciar el rescate de los cuerpos de las infortunadas trabajadoras, que por la modalidad de la tragedia, crece la hipótesis de que las tres mujeres se encuentren sin vida.

El rescate de los cuerpos podría demorar varios días, por la gran cantidad de tierra que habría sepultado a las infortunadas mujeres, pues en la zona se puede apreciar el agrietamiento de la superficie de diez metros de diámetro con una profundidad de ocho metros de altura.

Diario La Primera-Lima 26/10/2010