10 de enero de 2008

EXPLOTACIÓN DE ENERGÍAS RENOVABLES


Rosa Reyna Peláez - Periodista


La explotación de las energías renovables, duraderas y menos contaminantes en nuestro país, cuyo consumo favorecería a casi toda la población en igualdad de condiciones, aunque parezca un sueño, depende de dos condiciones concomitantes muy cerca de nosotros: de una legislación especial y de la voluntad política, que ha sido ya determinada por el gobierno del doctor Alan García, quien ha anunciado la creación de un Ministerio del Medio Ambiente.

Este ministerio integrará a las instituciones a fin de que desarrollen políticas públicas a favor de la construcción de un país con suficientes energías sostenibles para sus futuras generaciones, así como contribuir a la disminución ostensible del proceso de calentamiento global, para favorecer la protección del medio ambiente, de acuerdo con la suscripción del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.

Esta fue una apreciación conjunta de científicos extranjeros reunidos en el seminario internacional Energías renovables, a fines de noviembre pasado en el Congreso de la República. En la parte del diálogo, comentaron que países como el Perú, con recursos tan valiosos como los que forman la energía renovable provenientes del viento, la radiación solar, biomasa, geotermia, los ríos y el mar de gran oleaje, existen pocos en el mundo.

Al seminario asistieron científicos de renombre como Gerhard Stryi-Hipp (gerente de la Asociación de Energía Solar de Alemania), Martin Pehnt (científico del Instituto de Investigación de Energía y del Ambiente - IFEU de Alemania), Sara Larraín (ex candidata presidencial de Chile en 1999 y directora de la ONG Chile Sustentable) y el ingeniero Santiago Sánchez (gerente general de Enerpro - Ecuador), así como expertos peruanos del Ministerio de Energía y Minas.

El evento contó con el auspicio del Instituto Goethe, Equinoccio, Green Energy y el despacho de la congresista Hilda Guevara Gómez, presidenta de la Mesa de Mujeres Parlamentarias Peruanas.

Las energías renovables como la solar, eólica, hidráulica, mareomotriz, geotérmica y undimotriz (proveniente de las olas) aseguran la sostenibilidad del combustible, por lo que garantizan el abastecimiento seguro a largo plazo y tienen buen efecto sobre la estabilidad de precios del consumo. El establecimiento de este servicio, que al comienzo es costoso, claro, hasta poner en marcha la operatividad de los centros de generación, tiene beneficios en serie para el medio ambiente, la salud, alimentación, economía y educación de la sociedad.

Los científicos recomendaron que para asegurar la sostenibilidad y el desarrollo es necesario disponer la diversificación de la matriz de energía. El Perú es un país que depende en gran medida de enormes centrales hidroeléctricas, las cuales a su vez dependen de los glaciares; precisamente por ello es necesario buscar otras fuentes de energía que permitan complementar a las existentes. Además, hay que tener en cuenta que las energías renovables no dañan el medio ambiente, porque no emiten gases que provoquen el efecto invernadero, por ende, no producen daños ambientales que ocasionan el cambio climático.

Diario Panorama – Cajamarca 10/01/2008




MINISTERIO DEL MEDIO AMBIENTE ¿VOLUNTAD O IMPOSICION?


Vladimir Cerrón Rojas


Para cualquier ingenuo de la política la benevolencia del gobierno aprista creara el Ministerio del Medio Ambiente, una preocupación encomiable. La población peruana ha recibido la noticia de forma agradable, pero hay un grupo de peruanos empresarios que, por el contrario, han pegado el grito al cielo: la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) y la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (CONFIEP), diciéndole al gobierno que para que se va a crear mas burocracia, que incrementaran los gastos e impuestos, etc.

Sabemos que el planeta está entrando en un calentamiento constante debido a las altas emisiones de CO2 y sabemos, al igual que ellos (EE UU), que los yanquis son los que más contribuyen a dicha contaminación, con cerca del 25 % de los gases dañinos lanzados a la atmósfera. Es entendible, el porque los norteamericamos viven con la psicosis de que el mundo se acabara dentro de 20 años, razón no les falta. Por el contrario, ¿cual es la percepción en la América Latina? que el mundo se terminará pero, dentro de 1000 o 2000 años, que aquella psicosis está lejana, razón les falta, si consideramos solamente que los nevados de Pastoruri y Huaytapallana están en proceso de deglaciación.

Fuertes corrientes ambientalistas (corrientes verdes) norteamericanas y europeas, están jaqueando cada vez mas al gobierno norteamericano para la protección medioambiental, la reducción en la emisión de gases y la conservación de la capa de ozono, las mismas que han sugerido se considere entre los requisitos para firmar un TLC contar con dependencias que garanticen no seguir deteriorando el planeta. Esta entidad a la vez serviría de filtro para que todo lo que se importe a Norteamérica esté libre de contaminación (papas, verduras, peces, etc).

Si consideramos lo mencionado por Alan García en su artículo “El Perro del Hortelano”, donde ataca a las ONG de “viejos comunistas anticapitalistas del siglo XIX disfrazados de proteccionistas en el siglo XX y cambiados en el siglo XXI en medio ambientalistas”, sabemos que el deseo de Alan, es todo lo contrario. La consulta de Majaz, es prueba contundente que en contra de la voluntad popular, se trata de imponer los intereses de una minera a costas de contaminar el habitat comunal. Sin embargo, Majaz, después de la victoria en el referéndum, se ha convertido en la piedra angular de la derrota aprista.

Ahora podemos deducir claramente que el TLC, ha obligado a este gobierno a crear una dependencia ministerial para el control medioambiental, esa es la ley de la contradicción, el motorcito que hace que el mundo avance, puesto que si no hay contradicciones la vida hubiera cesado hace mucho tiempo.

La CONFIEP y la SNI, saben que con esto van a tener que invertir más en la ejecución de políticas de protección medioambiental, por que no todos sus productos flanquearían la barrera de la exportación. Si los movimientos, no necesariamente ONG, se fortalecen en este segmento político, sería difícil volver a contaminar ríos como el Mantaro en nuestro Perú y haríamos realidad el deseo de nuestro Presidente de bañarse en las aguas de nuestro río dentro de un año.

Diario El Correo – Huancayo 10/01/2008