15 de agosto de 2007

“IGLESIA EN COMUNIÓN, SERVIDORA DE LA VIDA”

CARTA ABIERTA

Cajamarca, 14 de agosto del 2007

La Comisión Diocesana de Defensa de la Vida y Medioambiente de Cajamarca, se dirige a:

Gobierno Central – Ministerio de Energía y Minas.
Gobierno Regional de Cajamarca – Gerencia de Medioambiente y Recursos Naturales.
Gobierno Provinciales y Locales de las zonas en conflicto.
Empresa Minera MisKimayo.
Pueblo en general.

Que frente a los hechos que se vienen suscitando en el Cerro Mogol ubicado en la cuenca del río Cajamarquino, cercano al valle de Condebamba, donde los pobladores de más de 20 comunidades campesinas de las provincias de Cajamarca, Cajabamba y San Marcos del Departamento de Cajamarca – Perú se han acantonando en el Cerro Mogol para exigir se suspendan los trabajos de exploración que la empresa Miskimayo de propiedad de la compañía brasilera Vale Do Río Doce viene realizando; manifestamos y pedimos:

1. Que las autoridades correspondientes cumplan con su responsabilidad de dar solución justa y equitativa al problema suscitado entre los campesinos y la empresa minera en mención propiciando una convivencia pacífica del hombre, la sociedad y la naturaleza ya que, como dijo el Papa Benedicto XVI, “Cada vez se ve más claramente un nexo insuperable entre la paz con la creación y la paz entre los hombres”.

2. Llamamos al dialogo justo y equitativo entre las partes, donde las autoridades y la empresa minera escuchen y acojan los reclamos de los campesinos respetando su decisión de continuar en sus actividades que tradicionalmente vienen realizando como son la agricultura y la ganadería principalmente.

3. Que no se den concesiones mineras, ni se otorguen autorizaciones para explorar y explotar sin antes consultar a la población afectada y sin que se hayan terminado los planes de ordenamiento territorial.

Como miembros de la iglesia y sintiendo el clamor de nuestros hermanos campesinos nos solidarizamos con ellos y apoyamos sus justos reclamos.

Fraternalmente,

P. Edison Ramos Valqui
Vicario de la Comisión Diocesana en
Defensa de la Vida y Medioambiente