2 de agosto de 2011

ZEE SE CONVIERTE EN INSTRUMENTO PARA LAS CONDICIONES DE INVERSIONES


Juan Carlos Paz, consultor en Organización y Modernización del Estado, aclaró que una planificación en materia territorial no implica negar la posibilidad del desarrollo de las inversiones mineras y energéticas sino que mediante ese instrumento se debe determinar en qué condiciones racionales pueden ejecutarse esos proyectos en las jurisdicciones.

El especialista en política pública explicó que la ley marco de ordenamiento territorial –que espera su aprobación en el Congreso- es un instrumento fundamental para planificar y organizar concertadamente las estrategias para aprovechar las potencialidades de las jurisdicciones en sus aspectos económicos, sociales y ecológicos.

Ponderó la importancia de este instrumento para el uso racional del territorio -que fue recogida en el discurso inaugural del presidente Ollanta Humala- en un escenario nacional donde se suceden numerosos conflictos sociales.

Indicó que se ha llegado a un buen nivel de diagnóstico con la elaboración de la Zonificación Económica Ecológica (ZEE) en varias regiones del país, sin embargo es insuficiente porque para complementar otros aspectos de la planificación y para tomar decisiones a corto y mediano plazo se requiere la aprobación en el Congreso del proyecto de la ley marco de ordenamiento territorial, hace un año encarpetado, cuya aplicación permitiría una zonificación económica, ecológica, medioambiental y social del país.

Señaló que los conflictos sociales se incuban por largo tiempo y responden al hecho de que no hay concertación entre el Estado, el empresariado y la sociedad civil sobre cómo aprovechar de consuno las posibilidades productivas del territorio.

Los mayores desencuentros giran alrededor de las inversiones extractivas, especialmente mineras, sin embargo subrayó que una planificación en materia territorial de ninguna manera implica negar la posibilidad del desarrollo de las inversiones mineras y energéticas sino que mediante ese instrumento se debe determinar en qué condiciones pueden efectuarse determinados emprendimientos.

Paz desaprobó aquellas posiciones que rechazan a priori el desarrollo de la industria minera pues –recordó- las tecnologías modernas permiten una convivencia fructífera entre esta actividad extractiva y otras como la agricultura.

Deploró que haya gente y grupos profundamente ideologizados que satanizan el tema de las inversiones mineras, sin embargo también hay buenas señales pues por ejemplo, refirió, ha conversado con autoridades regionales de Piura y Cajamarca –dos departamentos con extraordinarias potencialidades mineras- que le han expresado una posición equilibrada sobre el tema.

Diario El Mercurio-Cajamarca 02.08.2011