Miles de agricultores defienden su medio de subsistencia frente a los riesgos de la actividad extractiva.
CAMPESINOS DE PUNO NO QUIEREN MINERÍA
Pobladores defienden su espacio vital amenazado por la minería.
10 mil campesinos aymaras realizaron una marcha de sacrificio a Puno por la vía que une con Bolivia. Al llegar hasta la Plaza de Armas de Puno, instaron al presidente regional Mauricio Rodríguez y a los consejeros regionales a salir al mitin, para que expliquen sobre sus petitorios, que consiste en la emisión y publicación de la ordenanza regional que restringe la actividad minera en la región por ser atentatoria al agro de sobrevivencia, aprobada por mayoría por el consejo regional.
Campesinos de los distritos de Kelluyo, Pisacoma, Huacullani, de la comunidad Santa Cruz de Cumi, Comunidad de Lupaca y Collana de la ciudad de Desaguadero, del Centro Poblado de Inkasamawi de Acora, y del distrito de Zepita, jurisdicción de las provincias de Ilave, Chucuito, Yunguyo y Puno.
Los campesinos contaron ante una multitud que solo viven de la actividad agropecuaria y pesquera, “nosotros no queremos minería, porque trae atraso al campesino, las transnacionales se llevan nuestras riquezas, nos dejan pobreza, esterilizan nuestras tierras de cultivo, contaminan nuestros ríos y lagos, nos quieren someter como inquilinos en nuestro propio territorio cuando somos los dueños, no lo permitiremos, exigimos al gobierno que priorice el agro”, arengaban a su paso por las calles de la ciudad lacustre.
El presidente del Comité de Lucha, Walter Aduviri Calizaza, durante su alocución exigió la promulgación de la Ordenanza Regional 005-2011, tras denunciar que la minera usa a varias personas para acusar a dirigentes así como algunas autoridades, que trataron en vano de desconocerlo creando una representación paralela, “aquí tengo las actas que en Desaguadero, centro poblado de Yorohoco, junto a los 40 dirigentes fuimos elegidos en asamblea popular”, apuntó, tras precisar que la movilización responde a la defensa de los recursos naturales, y en rechazo al proyecto minero Santa Ana.
Hasta el cierre de esta edición, aún no se hacían presentes las autoridades del gobierno regional, no obstante ayer el presidente regional manifestó que estaba dispuesto a mantener el diálogo con los manifestantes.
Diario La Primera-Lima 01.04.2011