5 de marzo de 2008

LA EXCLUSIÓN QUE GENERA PROTESTA

NO TODOS SON PERROS DEL HORTELANO


Por Enrique Bernales Ballesteros. Jurista


Imagino que la turista alemana horrorizada por las carreteras bloqueadas, tuvo igual reacción ante las turbas que incendiaban cientos de automóviles en París. Supongo que habrá protestado por la violencia familiar contra tantas mujeres en España. Y el itinerario del horror le hará gritar su indignación por los asesinatos de los escolares en algunas escuelas de Estados Unidos; por lo que pasa en Darfur, en Pakistán y en tantos otros lugares. El mundo moderno, tan pleno de inventos que pueden hacer más bella la vida, está llena de horrores. Y, sin duda, el peor y más grave de los horrores es la pobreza.

Recuso la violencia como ideología y como actividad. Quienes desde el Cusco, Ayacucho, Iquitos o cualquier otro punto del país la ponen en práctica están equivocados y su actitud de mera negación sin alternativas, es un agravio a sus propias regiones, pues más se ganaría con el diálogo y la búsqueda de soluciones concertadas.

Es posible que a pesar de las cifras expuestas para reducir la pobreza, esta se mantenga igual en las vivencias de quienes cada día la sufren. En este terreno, es justo reclamar más prisa y cero pausas. Así, señor presidente, reconociendo su empeño, haga más, amplíe y convénzase de que no todo opositor a su gobierno es perro del hortelano. Tener una óptica diferente del desarrollo, no convierte a quien la sustenta en perro del hortelano. Si usted creyera lo contrario, abandonaría a Lope de Vega, para incursionar, como el Quijote de Cervantes, en denodada lucha contra los molinos de viento.

Pero no; sospecho que su molestia es por el ejercicio intelectual de quienes comentan sobre su 'derechización'; contra los que lo acusan de convertir la inversión extranjera en la panacea que cura todos los males; hacia quienes critican la composición de su Gabinete. No suscribo esas críticas y encuentro que hay políticas interesantes en su gobierno. Pero esta disposición no me lleva a admitir que toda posición antagónica significa ser perro del hortelano.

En realidad, hay que ser torpe para adoptar una posición obstruccionista a políticas sociales que se proponen reducir la pobreza. Si los programas ejecutados han alcanzado el 2007 la cantidad de S/.3.278 millones y el beneficio ha sido para los 811 distritos más pobres, eso es algo a reconocer y apoyar para que los programas se profundicen y tengan continuidad. Sin estos elementos, ningún plan contra la pobreza producirá un cambio definitivo, porque ella en el Perú está adentrada; es histórica y es estructural. Solo la ampliación de los espacios, la inclusión, la apertura hacia un pacto nacional y la conversión de los pobres en sujetos de derechos, podrá acabar con ella.

En esta perspectiva, a las políticas sociales, a las ofertas para que venga inversión extranjera regulada, habrá que añadir una atención sustancial a la problemática cultural de la pobreza. Ella se ha aposentado principalmente entre la población indígena y las comunidades nativas. Son pobres porque no tienen cómo y con qué satisfacer necesidades primarias; son pobres porque teniendo nacionalidad no tienen Estado. Desde su fundación, el gran error de nuestra república ha sido la exclusión de esos sectores; el mirarlos como un factor de atraso; el destruir sistemáticamente su autoestima.

Este es el aspecto más grave de la pobreza en el Perú y para combatirla, como decía Basadre, hay que volver la mirada al Perú profundo; revaluar las vertientes culturales heredadas del pasado; darle importancia a lo más valioso, que es el ser humano y reconocerlo como ciudadano que sin abandonar la práctica de costumbres ancestrales, tiene acceso a la modernidad. Esta dimensión falta y es necesario incorporarla.

Diario El Comercio – Lima 05/03/2008







HECHOS QUE MARCAN LA HISTORIA


Sociólogo: Avelino Zamora Lingán


En el siguiente artículo comentamos brevemente algunos hechos socio-políticos que están marcando la coyuntura actual local, nacional e internacional:


1. El 27 de febrero tuvo lugar en Cajamarca “ La Audiencia Pública Descentralizada Cajamarca –2008”, organizada por la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afro peruanos, Ambiente y Ecología, cuyo tema de debate fue la creación del Ministerio del Ambiente y Situación Ambiental del Departamento de Cajamarca. A dicho evento asistieron un aproximado de 600 personas entre alcaldes provinciales, distritales, dirigentes de organizaciones sociales de base, especialmente de los espacios territoriales que están siendo gravemente afectados por la actividad minera.


Como siempre, este importante evento, pasó casi desapercibido para las principales autoridades del gobierno regional y del gobierno local; para la gran mayoría de los medios de prensa hablada, escrita y televisiva y para los organismos oficiales, competentes en temas ambientales. ¿La razón? Tal audiencia no fue convocada por las autoridades oficiales, ni por las transnacionales mineras, menos por aquellas ONGs, cuya teoría es que agricultura y minería pueden convivir armónicamente.


Es así que cuando se tratan temas fundamentales como la actividad minera, el medio ambiente, el agua, la contaminación, los conflictos sociales, que obviamente están marcando los procesos sociales actuales en Cajamarca y el país y, se los trata desde una posición que no es la oficialista, queda bien marcada aquellas dos realidades sociales contradictorias, que muchos académicos lo plantean: la del Perú oficial y la del Perú profundo. El Perú oficial, centralizado en Lima, desde donde se propugna por la venta a “golpe de martillo” de todos nuestros recursos naturales y nuestros monumentos históricos a las transnacionales y agentes económicos locales, y desde el Perú profundo donde se aboga por la defensa de éstos. Los primeros amparados en su propia constitución, leyes y decretos y sobre todo en las fuerzas de represión; y los segundos amparados tan sólo en la verdad, en sus gritos y en su unión.


En fin, en el mencionado evento se manifestó una clara tendencia: el descontento generalizado con las actividades mineras, por las graves consecuencias que está generando en el ambiente, en los recursos naturales y sobre todo en la población campesina. Y por otro lado un desacuerdo generalizado y desconfianza con el famoso Ministerio del Ambiente. Dicho Ministerio, sería creado, según la percepción de la población, a exigencia de los Estados Unidos, con el único propósito de otorgar las mejores condiciones a la implementación del Tratado de Libre Comercio. Lo más cuestionado es la advertencia o amenaza que se hace desde el oficialismo y desde los agentes mineros es que dicho Ministerio no tendría competencia para tratar asuntos de la actividad minera, la contaminación ambiental no los problemas relacionados con el agua. Como es lógico y de sentido común, la población manifiesta: Entonces ¿Para qué queremos un Ministerio del ambiente que no va ser solución a los problemas del ambiente? ¿Queremos un ministerio del ambiente para olear y sacramentar el saqueo de los recursos naturales, la contaminación y la destrucción de los colchones acuíferos? ¿Queremos un ministerio que no solucione los problemas ambientales, al igual que un ministerio de trabajo que no soluciona los problemas laborales o un ministerio de educación que no soluciona los problemas educativos, etc?


Finalmente, mientras se estaba desarrollando la audiencia pública, en la que los alcaldes y dirigentes exponían los problemas que viene ocasionando las actividades mineras y su desconfianza sobre el Ministerio del Ambiente, se daba cuenta del derrame de una sustancia tóxica ¿petróleo dicen ellos) que postraba en cama a 9 personas de una empresa prestadora de servicios a la Minera. El tema es que dichas personas se contaminaron debido a que fueron conminados a recoger dicha sustancia derramada sin ninguna protección, más aún existiendo un equipo especial de la empresa minera preparado para este tipo de circunstancias. ¿Donde está la tan propagandizada responsabilidad social que dicen tener las empresas mineras?


2. Otros hechos de carácter nacional: El Paro agrario, a nivel nacional y el paro regional en el Cuzco. Aún cuando para el sector oficial “no pasaba nada”, dichos paros obligaron a que se declare el estado de emergencia, en las regiones del norte, con la finalidad de que se desate una represión policial y del ejercito indiscriminada contra los luchadores sociales. En efecto esto culminó con la muerte de 5 campesinos y la detención de más de 200, en todo el país. Sin embargo, esta actitud del oficialismo no es nueva: Desde los tiempos de la República , por no retroceder más, las lucha populares nunca son reconocidas oficialmente, siempre han sido declaradas ilegales y reprimidas; bajo el argumento de que detrás de ellas están los “revoltosos”, “los agitadores”, “los delincuentes”, “los comunistas”, “los izquierdistas”, “los radicales”, “los terroristas”, “los que no quieren el desarrollo”, etc. etc. En fin, desde la perspectiva oficial, es la sacrosanta democracia la que hay que cuidar a cualquier precio: desempleo, desnutrición infantil, entreguismo, abandono de agricultura, venta de los monumentos históricos, como Machu Pichu, contaminación, destrucción de acuíferos, represión, corrupción, amenazas presidenciales, imposición de leyes coercitivas, etc. Y, una de estas leyes lo constituye precisamente la famosa ley del arresto ciudadano.


¿En qué consiste? En que mediante esta Ley se estaría facultando a los ciudadanos a arrestar o a detener a otros ciudadanos, bajo tres condiciones según los cerebros “iluminados” que lo proponen: la primera, encontrar en flagrante delito a la persona o personas; la segunda, cuando ésta o éstas huyen o se corren para no ser detenidos y la tercera, cuando a dichas personas se les encuentra pruebas materiales del delito. Es cierto que la inseguridad en nuestro país crece cada vez más, debido a múltiples factores de carácter socioeconómico O ¿acaso hay quienes piensan que los delincuentes nacen? Pero también es cierto que existen varias entidades encargadas de la seguridad ciudadana, a saber: policía nacional, serenasgo, Rondas urbanas, Rondas campesinas, comités de autodefensa, vigilantes particulares, comités de vigilancia, policías municipales, policías escolares y ejercito y ahora ¡o que gran idea!, los ciudadanos a punto de ser convertidos en agentes de represión o en sus propios guardianes. ¿acaso esto no es promover que los ciudadanos hagan justicia por sus propias manos, lo cual tanto han condenado? O mejor dicho ¿esto no es promover la ley de la jungla o la ley del ojo por ojo? Y lo peor, esto sí que es promover más la violencia en nuestro país. ¿Acaso, los iluminados de dicha ley, creen que las personas que cometen el delito están desarmadas y se van a dejar detener o capturar como unas mansas palomas? ¿En qué quieren convertir a nuestro país? ¿En un Estado policiaco, tipo Colombia, medio oriente o tipo Estados Unidos, donde tres de cada cinco ciudadanos manejan armas, y hasta hay niños que se disputan su chupete a balazo limpio? El tema es que mientras no se ataque a los factores socio económicos que generan la delincuencia, como el desempleo, la pobreza y las grandes brechas entre ricos y pobres, así como a los modelos de delincuencia que se ofrece desde el propio Estado, como por ejemplo, la corrupción de cuello y corbata, ésta no disminuirá ni menos desaparecerá así cada uno de nosotros los ciudadanos seamos obligados a convertirnos en una especie de policía, sereno o guachimán.


3. Por último, el hecho internacional que acaba de suceder entre Colombia, Ecuador y Venezuela, a raíz del operativo realizado por Colombia en territorio Ecuatoriano dando como resultado la muerte de un importante miembro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - FARC. No cabe duda que a los ojos de quienes defienden la soberanía y la dignidad de los pueblos este hecho constituye una abierta provocación que se produce bajo el pretexto de “combatir al terrorismo”. Es evidente que esta acción violatoria de la soberanía ecuatoriana por Colombia responde a la política pro-imperialista de Estados Unidos, quien hoy se cree el gendarme internacional y paladín de la democracia, ha puesto en marcha una abierta política guerrerista y neocolonialista que está siendo aplicada en Europa, Asia, África y América Latina, gracias al apoyo encontrado en gobiernos títeres como el de Colombia. Es claro también, que para los ultraliberales de América Latina y del mundo no existe fronteras para los capitales, tampoco existe nación, ni existe patria, lo que existe es la voracidad de ganancia con sus poderosas empresas, transnacionales y multinacionales, aún a costo de atropellar la soberanía y los derechos de los pueblos. Concientes de ello tanto el gobierno ecuatoriano como el venezolano acaban de retirar sus funcionarios diplomáticos de Colombia y de expulsar a tales funcionarios de Ecuador y Venezuela respectivamente. Como no podía ser de otra manera, para los ultra-liberales criollos y sus instrumentos mediáticos el causante de esta crisis internacional es Hugo Chávez, quien ya fue calificado de “loco” y además de “abierto defensor de las FARC en América Latina”, por un “prestigioso” medio de comunicación nacional, solo por el hecho de anunciar que cerrará sus fronteras y además las reforzará militarmente para evitar hechos violatorios de su soberanía nacional como el que acaba de ocurrir con el ecuador. “Es muy peligroso, dicen, el hecho que los gobiernos de Ecuador y Venezuela asuman tales actitudes, el de ecuador, influenciado por el “gorila Chávez”, ¿Cómo es posible que en plena era de globalización y ultraliberalismo se actúe de esa manera? Y nosotros también preguntamos ¿Acaso no es más peligroso el hecho de que un país entre a otro territorio como si fuera su chacra o su hacienda, violando incluso tratados internacionales de soberanía territorial, con el pretexto de matar terroristas? Pues esta actitud también es muy peligrosa puesto que hoy la víctima ha sido Ecuador; pero, mañana puede ser Bolivia, Cuba, Nicaragua, Perú, etc. Y más peligroso es aún cuando hoy se ven terroristas hasta en la sopa: dirigentes sociales, estudiantes, políticos de izquierda, intelectuales, artistas, ambientalistas, campesinos, etc, etc. corren el riesgo de ser calificados y perseguidos como “terroristas”, cuando se oponen a medidas anti-populares que afectan los intereses del pueblo y cuando reclaman derechos postergados por más de 180 años.

www.caballeroredverde.blogspot.com - Cajamarca 05/03/2008